Hoy, más que nunca, las empresas afrontan un desafío que impacta directamente en su sostenibilidad: la retención del talento.
En una conversación reciente con un Director de RRHH de una empresa mediana, surgió una reflexión que sintetiza la situación actual:
“Podemos formar durante un año a un profesional, pero cuando está preparado, se marcha. Y no es por salario.”
Este testimonio refleja una realidad transversal:
La rotación del talento ya no responde mayoritariamente a cuestiones económicas, sino a experiencias de liderazgo, cultura interna, reconocimiento y oportunidades reales de desarrollo.
La rotación en cifras: una tendencia sostenida en 2025
Según el Employee Experience Report 2025, la rotación laboral en España se ha elevado hasta el 24,1%, cinco puntos más que el año anterior. Esto significa que una de cada cuatro posiciones ha sufrido cambios o movimientos durante el último año.
Esta rotación está impulsada, especialmente, por:
- Estrés laboral sostenido
- Escasa conexión emocional con la empresa
- Falta de sentido y propósito
- Insuficiente reconocimiento en el desempeño
Solo el 43,2% de los profesionales considera que su salario está alineado a su responsabilidad, y el 75% afirma no recibir reconocimiento con frecuencia, lo que incrementa la desconexión emocional. Además, solo el 59% se siente respaldado para gestionar el estrés emocional en su puesto de trabajo.
Estas cifras se suman a las ya conocidas tendencias:
- 65% de los profesionales abandonan la empresa por la calidad de liderazgo.
- La rotación media en España se sitúa entre 17% y 22%, alcanzando más del 35% en sectores de servicios y tecnología.
El coste invisible de la fuga de talento
La marcha de un profesional no implica únicamente cubrir una vacante.
Implica pérdida de valor estratégico:
| Coste visible | Coste invisible (más crítico) |
|---|---|
| Reclutamiento y selección | Pérdida de conocimiento interno |
| Onboarding y adaptación | Deterioro de clima emocional |
| Formación técnica y cultural | Sobrecarga en los compañeros |
| Tiempo hasta productividad | Desgaste motivacional |
El coste total estimado de reemplazo de un perfil cualificado puede equivaler a entre 6 y 9 meses de su salario.
Pero la mayor pérdida es intangible: su impacto humano y cultural.
¿Qué está sucediendo realmente en las organizaciones?
- Expectativas no alineadas con la experiencia interna.
Las personas buscan impacto y evolución. Si la empresa no genera ese entorno, se marchan. - Culturas centradas en la tarea, no en el propósito.
Cuando el trabajo pierde significado, la implicación emocional cae. - Liderazgo operativo en lugar de liderazgo inspirador.
Aún predominan estilos basados en control, no en confianza y desarrollo. - Equipos con niveles de madurez distintos y sin gestión emocional.
Esto deriva en fricción, desgaste y pérdida de coordinación.
La clave no es retener. La clave es que quieran quedarse.
La permanencia se construye desde tres ejes estratégicos:
| Eje | Objetivo | Resultado esperado |
|---|---|---|
| Liderazgo Emocional Transformador | Gestionar desde la presencia, escucha y acompañamiento. | Equipos comprometidos por convicción. |
| Propósito y Motivación Compartida | Conectar a la persona con el sentido de su contribución. | Pertenencia, orgullo y continuidad. |
| Cohesión de Equipos de Alto Desempeño | Alinear ritmos, talentos y roles. | Agilidad, seguridad psicológica y resultados sostenibles. |
La propuesta de Alto Potencial en Valor
Desde Alto Potencial en Valor, acompañamos a organizaciones a:
- Reducir la rotación desde la motivación interna y el sentido compartido.
- Fortalecer la cultura y el clima emocional, para que el talento quiera permanecer.
- Transformar el estilo de liderazgo hacia modelos inspiradores, humanos y estratégicos.
- Desarrollar equipos cohesionados, capaces de sostener rendimiento de forma saludable.
Resultados visibles:
- Mayor compromiso
- Menor rotación
- Mejora del clima laboral
- Incremento de productividad sostenible
- Estabilidad en la ejecución y continuidad en los aprendizajes
Porque hoy, más que nunca:
El talento no se retiene. El talento se inspira.